+ Sobre republicanos
Ley y Orden es el show televisivo donde ahora pueden ver en su salsa a Fred Thompson, uno de los candidatos a nominaciones presidenciales de Estados Unidos en un show con el que por cierto machacan todas las noches en la TNT y en no sé cuántos más canales. También pueden verle en su campaña de candidatura por los estados o por donde quiera que hable en público este llamado a veces “nuevo Reagan”; un republicano conservador en línea con los valores más tradicionales de Norteamérica. Sus tres palabras, unidad, seguridad y prosperidad, podrían llevar a la Casa Blanca a este antiintervencionista, antiabortista, anticlonacionista y defensor de la guerra contra el terrorismo que parte con una campaña de esas que se suelen llamar brillantes.
“Poner tiritas a problemas de úlcera”. Así ha definido Ron Paul, otro republican, la política exterior norteamericana, entendiendo que “comprar aliados no sirve de nada” porque luego van y te la juegan. El comercio sí, eso ya es otra cosa. Compre, venda, recompre y revenda al tirano, es la línea de actuación de este carca gilipollas antiisraelí, que piensa que la hegemonía se mantiene haciendo del comercio un paraguas y dejando que llueva.
Otro asunto es Giuliani, ex alcalde de NY, ese que se negó a compartir un evento con Arafat y que dijo que executaría a Bin Laden con “estas manitas”. El mismo que limpió de escoria el downtown y los barrios neoyorquinos, lo cual ya es una garantía de algo. Dicen que no es tan conservador como el resto: es proabortista, favorable a las uniones homosexuales y llegó a proponer el control de armas mediante examen, cosas que gustarán bastante más a los votantes que al grueso y algunos dinosaurios de su propio partido.
También le suelen dar el coñazo por haber tenido aventuras extraconyugales, soltando ese rollete de que si eres infiel a tu esposa, que harás con el país, como le serás fiel a los votantes y etcétera. Y qué quieren que les diga, pues no. Un presidente debe saber trascender a su vida privada. Puede un pollo como Romney ser muy fiel a su parienta, y luego ir diciendo que el problema del Islam radical se cura llevándoles a todos a la modernidad. Como si los jihadistas no manejaran coches último modelo y nos estuvieran matando con piedras y en taparrabos, no te joroba.
Antes que yo y mejor que yo ya habló de esto La Carga de la Brigada Eléctrica.
Por Cruzcampo