+ Los 11.000 millonesde Zapatero
[Soy prevost editando la entrada de Wolfer, que regresa al blog. Como se me pasó el sábado y se quedó la entrada con la hora del borrador, lo actualizo y coloco al frente para darle la bienvenida. Pues eso, bienvenido, o mejor dicho, hola de nuevo Wolfer]
España atraviesa una profunda crisis económica. Este hecho es innegable, máxime cuando el pasado viernes se han publicado los últimos datos de paro del Eurostat y hace pocos días las previsiones de crecimiento negativo del PIB. España, como no podía ser menos, está a la cabeza de paro europeo con un 12,8% de la población activa. Estamos 5,1 puntos porcentuales por encima de la media de la eurozona y 5,7 de la UE de los 27. Estamos destruyendo los mismos puestos de trabajo diarios (260) que los que se creaban en la etapa del gobierno popular de Aznar.
España atraviesa una profunda crisis económica. Este hecho es innegable, máxime cuando el pasado viernes se han publicado los últimos datos de paro del Eurostat y hace pocos días las previsiones de crecimiento negativo del PIB. España, como no podía ser menos, está a la cabeza de paro europeo con un 12,8% de la población activa. Estamos 5,1 puntos porcentuales por encima de la media de la eurozona y 5,7 de la UE de los 27. Estamos destruyendo los mismos puestos de trabajo diarios (260) que los que se creaban en la etapa del gobierno popular de Aznar.
La última 'idea' de nuestro gurú económico para sacarnos de la crisis no ha sido otra que anunciar a bombo y platillo la inyección de 11.000 millones de euros en gasto público para intentar reactivar la economía. Medida mediática que va a generar más recesión y paro y que se encuadra dentro de las cerca de 80 medidas que ya se han anunciado y cuyos efectos no vemos por ningún lado.
La izquierda de este país parece que no ha asumido el fracaso del sistema economico socialista y sigue obcecado con la idea de que la inversión pública con cargo a la deuda pública reactiva la economía. Nada se ha demostrado más erróneo. La inversión del Estado con cargo a la deuda pública genera que nuestros ahorros, en lugar de ir destinado a que las empresas tengan la liquidez necesaria para poder desarrollar su actividad y generar economía, se destinará irremediablemente a financiar al Estado.
Desde un punto de vista económico es mucho más efectivo seguir una política de rebaja selectiva de impuestos a particulares y empresas, tal y como recomienda la UE. Por el lado de los particulares es preferible que el contribuyente tenga el dinero en el bolsillo y decida como lo va a gastar, y no que sea el Estado el que decida; por el lado de las empresas es preferible que el dinero lo destinen a realizar inversiones en Investigación, desarrollo e innovación, que son las auténticas generadoras de actividad, crecimiento y empleo.
Por desgracia es previsible que en las próximas semanas ZP seguirá anunciando medidas como los 11.000 millones. Esperemos que sea como el famoso Plan de Cercanías de Madrid, que se ha anunciado en más de cinco ocasiones y que todavía no hemos visto ni un euro para la región.
Por Wolfer