+ Manifiesto Clases Medias, 2ª Edición
Nos comunica Enrique que el Manifiesto de las clases Medias ya va por la segunda edición. Muy buena noticia. Os dejo la carta que nos escribe:
El primer obstáculo fue conseguir publicarlo. Lo ofrecí a diversas editoriales, con las que he trabajado anteriormente, y me encontré las puertas cerradas, a veces con sinrazones peregrinas. Por ejemplo, que el libro es breve. Bueno, no más que el nefando y genocida manifiesto comunista del que se han hecho miles de ediciones. Luego acudí a otras. Incluso a algunas testimoniales que daba por seguro que estarían interesadas. Ni por esas. Llegué a la conclusión de que tan sorprendentes reacciones tenían una lógica: puesto que el libro va contra el sistema y plantea un cambio de raíz, ninguna editorial lo iba a publicar. Hay muchos mensajes, en forma de libros y en otros formatos, que parecen contra el sistema pero que no pretenden otra cosa que servir de coartada, apuntalar lo existente y buscar acomodo en el stablishment. El lector puede comprobar desde la primera página que el objetivo es muy otro, que no es un mensaje al uso, ni condescendiente.
Así que no había otra opción que publicarlo de mi bolsillo y generar una editorial nueva, cuestión sobre la que mi experiencia era escasa. Había que buscar, por de pronto, una distribuidora. Me puse en contacto con SGEL que es la mejor y que cubre todo el territorio nacional. La verdad es que acudí a la reunión con la secreta esperanza de que me dijeran que no para quedarme tranquilo, en el sentido de que lo había intentado todo. Para mí sorpresa, acogieron muy bien la iniciativa, aunque me pusieron objetivos de partida más ambiciosos de los que me había planteado. Había que ir a una tirada larga para lo habitual en el mundo del ensayo político. Estuvo a punto de naufragar el proyecto, o al menos a retrasarse, porque la editorial no estaba constituida y la única posibilidad era sacarlo como libro de autor, una modalidad que el mercado rechaza porque el ISBN da pocas pistas a las librerías respecto a cómo hacerse con el libro. Es decir que “El manifiesto de las clases medias” salió como un outsider total. Contaba con la propia red Relay de SGEL para darse a conocer y confiaba en la respuesta del público.
Se han vencido, una a una, las resistencias de las llamadas ‘grandes cuentas’. Fnac rechazó el libro y luego ha tenido que pedirlo. Vips rechazó el libro y ha tenido que pedirlo. Troa no consideró oportuno solicitarlo y ya lo tiene a la venta. La Casa del Libro hizo un pedido muy bajo y luego ha tenido que hacer continuas reposiciones. El Corte Inglés lo mismo, para unos pocos centros, sin pedido centralizado, y ahora lo tienen todos los centros y el libro ha ido pasando de estanterías escondidas a la mesa de novedades. Carrefour ha agotado, pero ahora hay que solicitarlo en sus centros. Bueno, son pequeñas victorias que parecían imposibles y que las han conseguido los lectores con sus soberanía de consumidores, porque han sido ellos los que han ido encargando el libro y obligando a romper la inercia de las burocracias de las empresas. Cada semana me llegan peticiones de librerías de toda España. De modo que la beneficiosa mancha se extiende. En cualquier punto de venta de libros se puede conseguir indicando que el libro lo distribuye SGEL. Alguna librería, más despabilada, ha hecho acopio, a la vista de que la gente lo buscaba. Esto no ha hecho más que empezar. En buena medida, todos esos obstáculos se han ido venciendo por la respuesta entusiasta de los oyentes de ‘A Fondo’ y de ‘El país de las maravillas’ de Radio Intereconomía, que han actuado como focos de la difusión, ampliando el efecto y haciéndolo llegar a nuevas gentes.
Por Prevost