+ Cornudos y apaleados
En España tenemos una larga tradición de desprecio al capitalismo que se remonta a mucho antes del siglo de Franco. Ya en el siglo XVI en España determinadas actividades eran mal vistas, el rentista bueno, el empresario malo. El pensamiento estúpidizante en España ha avanzado y ahora es trabajadores buenos, todos los demás malos malísimos.
Recientemente la UCD inventó una manera de apalear y linchar públicamente a los empresarios vinculados al Gobierno. Reunió a los sindicatos subvencionados, con las empresas que sirven a las instituciones públicas en lo que llamó "diálogo social".
En un afán de conservar la verticalidad sindical de Franco la UCD invitó a ese "diálogo" a la CEOE, institución que no sabe nada del mercado y que sabe poco de la función empresarial, compuesta de apandillados del gobierno de turno y de empresas crecidas y nacidas al amparo de las administraciones públicas y con el beneplácito de conseguidores y partidos políticos.
Por eso la CEOE no se ha distinguido, nunca, por defender el libre mercado, ni el capitalismo, ni siquiera ha intentado reducir los impuestos. Pero eso sí, hay un límite por debajo del cual no pueden operar, y se ven obligados a defender un mínimo de libertad en el mercado laboral.
En la última negociación el Gobierno los ha culpado del fracaso del "diálogo", y los sindicatos... Mejor no hablar. El presidente de la CEOE había llegado a límites de sumisión y humillación difícilmente compatibles con una posición erguida. Pese a todo se consumó lo que era previsible, o la CEOE transigía y todo seguía igual, o no transigía y todo seguía igual y, además, lo insultaban más aún. No transigieron, por el momento, y los insultos arreciaron:
Recientemente la UCD inventó una manera de apalear y linchar públicamente a los empresarios vinculados al Gobierno. Reunió a los sindicatos subvencionados, con las empresas que sirven a las instituciones públicas en lo que llamó "diálogo social".
En un afán de conservar la verticalidad sindical de Franco la UCD invitó a ese "diálogo" a la CEOE, institución que no sabe nada del mercado y que sabe poco de la función empresarial, compuesta de apandillados del gobierno de turno y de empresas crecidas y nacidas al amparo de las administraciones públicas y con el beneplácito de conseguidores y partidos políticos.
Por eso la CEOE no se ha distinguido, nunca, por defender el libre mercado, ni el capitalismo, ni siquiera ha intentado reducir los impuestos. Pero eso sí, hay un límite por debajo del cual no pueden operar, y se ven obligados a defender un mínimo de libertad en el mercado laboral.
En la última negociación el Gobierno los ha culpado del fracaso del "diálogo", y los sindicatos... Mejor no hablar. El presidente de la CEOE había llegado a límites de sumisión y humillación difícilmente compatibles con una posición erguida. Pese a todo se consumó lo que era previsible, o la CEOE transigía y todo seguía igual, o no transigía y todo seguía igual y, además, lo insultaban más aún. No transigieron, por el momento, y los insultos arreciaron:
Además, Díaz Ferrán aseguró que en la CEOE se tiene "la sospecha" de que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "está influenciado por los sindicatos" que, en su opinión, han sido los que han "acotado" la situación cuando "no han creado un puesto de trabajo en su vida". "Somos nosotros los que conocemos las condiciones necesarias para generar empleo y eso es lo que hemos puesto en nuestro documento", puntualizó.Fuente
El señor Díaz Ferrán no sabe mucho de las condiciones necesarias para crear empleo, porque si lo supiera no se mostraria favorable a medidas para generar paro, pero es que sabe aún menos de relaciones humanas. La CEOE lleva 30 años recibiendo palos de los sindicatos y del Gobierno de turno, 30 años siendo el saco de boxeo es una costumbre difícil de extirpar, pero su presencia no ha contribuído.
Ahora es tarde para sacar algo de orgullo, el señor Diaz Ferrán debió acordarse de su orgullo antes, pero entonces estaba más interesado en poner el cazo... Cornudos y apaleados es la expresión castellana para los que, como él, primero se agachan esperando la mamandurria y lo único que reciben es la merecida patada en el culo.
Ahora es tarde para sacar algo de orgullo, el señor Diaz Ferrán debió acordarse de su orgullo antes, pero entonces estaba más interesado en poner el cazo... Cornudos y apaleados es la expresión castellana para los que, como él, primero se agachan esperando la mamandurria y lo único que reciben es la merecida patada en el culo.
Por Maestre de Campo