+ El bueno, el feo y el malo
EL bueno. Bill Clinton. Anda de buenote por la vida. Antes también iba así, a veces progre en política exterior, sí, pero bueno, sobretodo con Mónica, al principio. Pero ahora lo es con muchos más. El tandem Clinton –Bush padre se afana para buscar créditos y pasta larga para las víctimas del Tsunami, las del Katrina, y no sé qué más, y se empeñan en conseguir rebajas para los medicamentos contra el sida en el Tercer Mundo, y sí, fíjense, los han rebajao un setenta por ciento.
Entrevistado el ex el otro día en la televisión de su país, un periodista le preguntó cómo era posible que apoyara en muchas cosas al gobierno de Bush cuando se supone que son dos unos políticos rivales. Clinton contestó que Bush estaba consiguiendo dinero del congreso que en aquellos tiempos él no consiguió, por lo que se apuntaba a defender proyectos que estaban en su mente por encima de fobias y filias políticas. ¿Se imaginan a Felipón viajando con Aznar para conseguir fondos para damnificados, o trabajando para el gobierno de Aznar por el bien de España? Jo jojojoooo.
El feo. Juan José Ibarretxe. Presidente de Dinkilandia. País inventor de la masturbación (Oscar Terol dixit). Experto en reinos libres asociados y propagador del politiqués, lingua franca usada en la península para entenderse en política entre las nacionalidades plurales singulares.
En su superblog de la campaña nos contaba cómo sí que es posible conseguir la pax euskalduna y un acuerdo de normalización a través de un diálogo sincero. Que hay que hablar menos y hacer más. Eso es verdad. Pero me deja una duda, si lo importante es dialogar, entonces qué hay que hacer, ¿hablar más o hablar menos?
Ibarretxe tiene el gusto de dirigir los destinos ( no todos) de un atajo de carrozas que se extinguen a pasos agigantados , una tierra donde, cito textualmente al Diario Vasco, el envejecimiento de la población es “evidente”, con una media de edad de los cabezas de familia situada entre los 56 años y de la población alrededor de los cuarenta y tres. “Existe un retraso, o una renuncia a los procesos de reproducción”, dice la noticia.
Señor Ibarretxe, ¿ ha pensao qué diría Sabino si se enterase de esto y echase un vistazo a la estadística de inmigración?
El malo. Mahmoud Ahmadinejad. Malo entre los malos. Y miren que hay malos, y además, muchos se llaman Mahmoud.
La de problemas que nos habríamos ahorrado si al Profeta le hubiera dado por poner la Luna esa que tanto le gustaba como territorio Dar al Islam. Ahora estarían todos allí , en la Luna, posiblemente lapidando a baja gravedad y practicando la religión más defendida por los ateos del planeta Tierra.
Pero a falta de otros mundos , el tío que manda en Irán ya está haciendo planes de cómo se van a repartir éste entre todos y ha propuesto que los judíos nos vayamos a vivir entre otros lugares muy fríos, al Estado de Alaska, un suponer. Al menos los que viven en Eretz Israel. Algo así como la otra punta.
Y claro, si resulta que nadie nos quiere por ahí, él, como a modo de favor, se ofrece para borrarnos.
Los negadores del Holocausto, que no sólo son Mahmoudes, también son Manolos, y están en la gueb de ahí al lado, suelen decir que por aquello el mundo no hizo nada porque no pasaba nada. Como USA tampoco hizo nada para evitar el 11 de Septiembre porque tampoco iba a pasar nada o como nadie hizo nada para evitar los cien millones de muertos del comunismo porque no estaba muriendo nadie, o como no se hizo nada para acabar con el franquismo porque no había franquismo.
Y ahora, si no se para a tiempo a este loco, la versión correcta será que nadie estaba amenazando a nadie. Todo esto fue producto de su imaginación. Y no le den más vueltas.
Por Cruzcampo