+ Salir corriendo
Un magnífico día, de esos que te apetece disfrutar desde el principio a fin, respirar su aroma y saborear cada uno de sus minutos. A las siete de la mañana observo por la televisión cómo unas carretillas del barsa , no se cuántos guardias civiles y policía nacional necesarios para parar una de esas manifestaciones antiglobalización tan pacíficas, se llevan como ladrones furtivos por la noche los documentos del Archivo de Salamanca, o lo que es lo mismo, miro perpleja cómo ZP es capaz de cortar el país en trocitos por pegarse con cinta adhesiva al sofá de la Moncloa.
Seguimos con ese pobre Capitán que se le ha ocurrido abrir la boca y ya está convenientemente sancionado, sólo, por decir verdades y hechos verídicos; luego media Europa hablando de qué coño pasa en España, que si Mena, que si Batasuna, que si estos españoles están locos o es que nunca han estado lo suficientemente cuerdos. Mientras ZP continúa queriendo cerrar el estatuto dichoso antes no se qué día que tiene el congreso del PSOE, ya saben, hay que ir con prisa que tiene que lavar su cara angelical.
Si miramos un poco fuera de los pirineos, vemos al bueno de Chirac, ese noble francés, que no ha dudado en decir que utilizará armas nucleares si su país es atacado por el terrorismo ese de mares de injusticia universales, llega a ser el trío de los azores el que afirma esas ansias de paz infinita y tendríamos al rogerio ladrando, colérico y rabioso. Y como ya éramos pocos, tenemos al señor Bin Laden diciendo que él está aquí, que nunca se ha marchado, que nos desea lo mejor de lo mejor y que una bomba nos va hacer subir directos nuestra escalera hacia el cielo.
Seguimos con ese pobre Capitán que se le ha ocurrido abrir la boca y ya está convenientemente sancionado, sólo, por decir verdades y hechos verídicos; luego media Europa hablando de qué coño pasa en España, que si Mena, que si Batasuna, que si estos españoles están locos o es que nunca han estado lo suficientemente cuerdos. Mientras ZP continúa queriendo cerrar el estatuto dichoso antes no se qué día que tiene el congreso del PSOE, ya saben, hay que ir con prisa que tiene que lavar su cara angelical.
Si miramos un poco fuera de los pirineos, vemos al bueno de Chirac, ese noble francés, que no ha dudado en decir que utilizará armas nucleares si su país es atacado por el terrorismo ese de mares de injusticia universales, llega a ser el trío de los azores el que afirma esas ansias de paz infinita y tendríamos al rogerio ladrando, colérico y rabioso. Y como ya éramos pocos, tenemos al señor Bin Laden diciendo que él está aquí, que nunca se ha marchado, que nos desea lo mejor de lo mejor y que una bomba nos va hacer subir directos nuestra escalera hacia el cielo.
Como ver todo el panorama dan ganas de salir corriendo y decir que ahí se queden ustedes , he reflexionado sobre ello, sobre cómo el mundo está loco, el por qué los buenos son ahora los malos y los malos son los pobrecitos, por qué las personas más ruines, ambiciosas y egocéntricas a priori salen victoriosas de cada uno de las batallas en las que participan y he dado con la respuesta. Son nuestras ganas de salir huyendo, de tirar la toalla, de cerrar los ojos, los que dan alas a que se produzcan todos los sucesos que he relatado. Por eso, antes de volver a ver las noticias de las siete de mañana, pensaré que se pierden batallas pero faltan por ganar todavía muchas guerras.
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