+ Prevcast
O podcast, vuecencias y señoritas decididrán. Como ya conocéis mi voz (sí, de aquella nerviosa aparición en Radio Intereconomía al estilo del Sindicato de Estudiantes) no creo temer por mi vida si una vez a la semana os dejo uno de los posts en formato podcast. Uséase, tendréis un rss que os avisará cuando salga y se descargará a los feixistes adinerados que tenéis Ipod. Así mismo podréis escucharlo en formato mp3 desde el pc.
Hoy he comenzado a investigarlo, y creo que uno de estos días ya sale adelante. Hace meses que ando dándoles vueltas y dónde comenzar, siempre ahí me stoppo. Si me veo con fuerzas, y se me da bien, quizá os recito poesía y todo, no mía (sería copylefteando of course, o silbando como en la ducha si no me enchironan los talánticos del control juntural) porque mi creación se reduce a los ripios cachondos que les hago a mis amigas por sus cumpleaños, o las rapsodias de las aventuras y desventuras con mis amics. Pero todo se andará, esto lo veo algo divertido, e interesante. Si nadie me desdice y comenta que la palabra podcast es una marca registrada de la SGAE (ya sabéis, zzzzz), como todo lo escrito en este blog, los posts leídos tendrán licencia Creative commmons.
Bueno, y es Lunes, volvemos a la normalidad dentro de la anormalidad que recorre los pasajes del II año del Talante y los "derechos" en la Expain. Se acabaron mis trabajos en el gulag siberiano, las orgías en la Habana o mis escolta armada al señor Evo Morales.
Por Prevost